Se llevó a cabo un nuevo proceso de participación ciudadana solicitado por la Junta de Vigilancia del río Maipo Primera sección (JVRM), en el marco de la tramitación de un proyecto de extracción de áridos en la comuna denominado “Extracción mecanizada en ribera sur río Maipo km 3.750 al km 4500 y km 5500 al km 6500 aguas abajo puente Maipo”.
El nuevo proyecto, que busca desarrollar una faena extractiva en el cauce extrayendo un total de 498.011 m3, en un plazo de 50 meses corridos, con una tasa mensual de 10.000 m3, alertó a los miembros de la JVRM y a sus usuarios porque se suma a otras explotaciones que están en actividad, en un cauce que ya está gravemente afectado desde el punto de vista sedimentológico.
“Solicitamos la realización de un proceso de participación ciudadana porque es fundamental que la comunidad y quienes se ven afectados por las consecuencias de esta actividad conozcan los alcances de estos proyectos y para evaluar si cumplen adecuadamente con la regulación vigente para que, en caso de no hacerlo, se indique dentro de la tramitación del mismo”, explicó el gerente y juez de Río de la JVRM, Ernesto Veres.
Además, el gerente técnico de la JVRM, José Manuel Córdova, indicó que “más allá de los efectos que prevén los estudios y evaluaciones previas, uno de nuestros objetivos es hacer presente los problemas derivados de la actividad simultánea de muchos proyectos, porque si esta iniciativa es aprobada, se trataría del décimo proyecto con permiso vigente para funcionar, solo en Buin. Desde la JVRM nos preocupamos de evaluar los impactos que no están normados y también estimar los efectos sinérgicos que esto produce y que, lamentablemente, la cuenca del Río Maipo ha venido experimentando en las últimas décadas con graves efectos para el ecosistema, las comunidades y los usuarios del agua”.
Desde la JVRM también apuntan a la debilidad de la regulación actual en la materia, “porque ha demostrado ser insuficiente a la hora de garantizar que la actividad de extracción de áridos no genere efectos indeseados sobre el cauce, pues sólo se limita a evaluar y considerar alguna de sus consecuencias. El aspecto más deficiente de la normativa es que no considera el efecto sumativo de la existencia de varias explotaciones operando de forma simultánea”, afirmó Luis Baertl, presidente de la JVRM.
Agregó que “en el río Maipo, desde la comuna de San José de Maipo hasta Buin, existen actualmente 30 proyectos con permisos vigentes, en distintas etapas de funcionamiento; esto evidentemente genera un daño al lecho y a toda la infraestructura hidráulica presente: hablamos de los puentes y de las bocatomas donde se capta el agua para el riego de miles de hectáreas de cultivos, por lo que los efectos negativos de esta indiscriminada extracción lo sufren todas las comunidades y lo pudimos constatar en este invierno con las consecuencias que dejaron los frentes climáticos vividos”.
El proceso de participación ciudadana en la tramitación de este proyecto culminó el 17 de noviembre, plazo en el que organizaciones y personas naturales hicieron llegar sus observaciones al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), entidad que luego iniciará la etapa de evaluación que se extiende hasta enero de 2024.
